Dentro de las distintas temáticas que podemos abordar a través del blanco y negro, quisiera en esta ocasión hablar sobre la fotografía de paisaje.

Cuando nos referimos a la fotografía de paisaje en color, generalmente asociamos ésta a la contemplación de la belleza que nos brinda la naturaleza por sí misma y consecuentemente a captar y plasmar con nuestra cámara aquellas escenas que el paisaje en sí mismo nos ofrece.

Sin embargo, la fotografía de paisaje en blanco y negro puede llegar a ser mucho más subjetiva y posibilita al fotógrafo no sólo a captar lo que tiene delante, sino a interpretarlo a su modo, de forma que puede dotar a sus imágenes de su sello característico, quizá más alejado de la realidad, pero también, indudablemente, más personal.

Es entonces cuando, evitando localizaciones «emblemáticas», el fotógrafo puede hacer un buen ejercicio de búsqueda en motivos aparentemente simples y poco llamativos, para conseguir transmitir en su obra final ese algo más que no se encuentra en la realidad, sino que es parte de sí mismo.

He querido esta vez recopilar para vosotros, los enlaces a los trabajos de una serie de fotógrafos que , a mi modo de ver, poseen una forma muy personal de interpretar el paisaje.
Os animo a que descubráis las obras de: