TUMISU El to color el mio color el so color El color con que se miran las cosas

Nuestras experiencias y nuestras ideas tienden a ser comunes, y hemos desatendido el don de ver las cosas a través de nuestros sentidos.

La forma de mirar es pensar, pero mirar es también intuir, una mirada es la invención tras la cual habita una idea.

Cada día las herramientas son más fáciles de entender y manejar están al alcance de todos. En la actualidad ni siquiera necesitamos de una cámara para fotografiar, lo que nos hace pensar en el hecho de que la creatividad y originalidad cobran aún más importancia de la que siempre han tenido.

 Reflexionar sobre la tendencia democratizadora del arte, consistente en facilitar  la creatividad humana, donde lo realmente importante seria la singularidad y no la repetición continua. La facilidad con que nos acercamos al arte a través de la fotografía nos plantea sin duda una nueva revisión de este.

 TOTÉMICAS.

El totemismo hace referencia a un conjunto de creencias de índole religioso, social e incluso político, característicos de las poblaciones primitivas y de las tribus, en donde es fundamental la utilización de  una figura simbólica denominada tótem, en donde se encuentran representados diferentes tipos de espíritus  pero que guardan alguna relación de estirpe; siendo la representación de aquello que une a todos y cada uno de los integrantes de dichas tribus o pueblos.

En marzo 1857, en el marco de la Revolución industrial, las trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York salieron a la calle a protestar en masa por las duras condiciones de trabajo. Si bien es cierto, que en ese momento las condiciones laborales de todos los trabajadores eran durísimas, la precariedad se cebaba especialmente con la parte femenina del sector, cuyos salarios podían llegar a ser menos de la mitad que los de los hombres solo por el hecho de ser mujeres.

Hoy continúan luchando por todos los medios que se conocen, públicos y privados, para hacer valer sus derechos  su dignidad, y que la igualdad sea al final una realidad.

PANTEON ORISHA

 Una llovizna de formas surge de los recuerdos, y danzando frente a mi,  tienden un puente de historias, que amanecen en mis ojos, y me atan a lugares que creía ya olvidados, me discuto y mis ideas me piensan.

 Ni veo ni miro en palabras, la escritura se transforma prisionera de la imagen, y sigo aquí, escondido en mi memoria.

Entre un follaje de espejos los sentidos se dispersan, me golpeo en cada esquina, me sumerjo en cada imagen, y ellas mismas me devuelven a los bordes de los sueños.

En el veneno que amamos,

en los rincones extraños.

Las paredes que nos vieron murmurándome al oído,

los gemidos y susurros.

 

Es inútil que golpee,

es inútil que marchite,

es inútil que me mire, que me ame,

que me odie eternamente.

Es el eco de mi voz que me seca la garganta.

PANTEON AÑIL                                   

Afinado en intervalos de quintas

                                    Do – Sol – Re – La

 

Al margen queda la palabra

                                            la soledad tendida,

                                              las manos frías,

                                       al margen, la propia vida.

El momento inevitable de descubrir la mirada, la manera de entender, ese gesto abierto y decidido es la parte me ata a la fotografía.

Leer una imagen, observarla, abandonarse a la idea de perderse en ella, entender que se convierte en algo más que un medio de expresión, que es la propia existencia, una forma de inmortalidad que te hace sentir intensamente.

Al margen de la intención, al margen vuelan acordes de un verso, que se dibuja en la imagen.  El azul Klein seduce, traspasa los sentidos, movimiento o mirada fija, como en una sinfonía, con un halo de misterio que me agita, que me ata de madrugada, me rescata del frío intenso en la noche. Te mueves frente a mí, giras, vuelves, desapareces, y me miras fijamente como ofreciéndome un reto, como partiendo una estrella, con esa frágil melodía que me envuelve, que me lleva, caigo en otra mirada donde poder detenerme. Como  como si fuera un arroyo, bebí y era la forma de buscarte, como una gota en el tiempo, como si fuera una ola, bebí y era la forma de amarte.

 

 

                              Solo bebo de la imagen

solo busco la mirada,

solo la veo pasar,

solo detrás del cristal.

 

 Jorge Alonso Molina